“Mi paso por la Usach me llena de orgullo. Marcó y definió mi camino profesional”

“Ingresar a la Escuela de Arquitectura de la Usach  era llegar a un mundo distinto al que estaba acostumbrado,  pero fue una etapa muy enriquecedora  de mi vida”. Así recuerda el actual alcalde de La Reina y arquitecto de la Universidad de Santiago, José Manuel Palacios, sus primeros días como estudiante de nuestro Plantel. Comenta que en esta Casa de Estudios aprendió muchas más cosas que aquellas meramente académicas. “Me siento profundamente usachino”, remarca.

“Hice en la Universidad de Santiago una gran cantidad de amigos que todavía mantengo; comencé a ver la vida de otra forma porque convives con distintas realidades en término de personalidades, de tipologías de seres humanos, aparte que efectivamente sobre todo en Arquitectura, las características de los compañeros son bien particulares, porque tienen una carga creativa importante que ayuda a generar una sinergia personal y a ponerte desafíos mucho más exigentes que los mismos que te da la carrera y los originales que traías del colegio”, sostiene.

¿Por qué eligió a la Usach como su alma máter?

- Ingresé a la Escuela de Arquitectura el año 1993. Dos amigos que estudiaban allá me la recomendaron. Desde la perspectiva de lo que yo viví dentro de la Escuela, la carrera de Arquitectura en la Usach tiene ciertas particularidades vanguardistas, en el sentido de ir buscando  nuevos caminos de experimentaciones arquitectónicas a través de la tecnología y otras herramientas que nos fueron enseñando. Recuerdo mucho que nos inculcaban que no había que darle bajada inmediatamente a  lo arquitectónico, sino que debíamos mantenernos en una lógica bastante abstracta hasta tercer año, para no apresurar un proceso que de forma natural debía darse. Cuando ya comenzamos a hacer un poco de arquitectura te das cuenta que el proceso de diseño ya no es forzado sino más bien natural. Es ahí cuando notas que aprendiste el lenguaje arquitectónico.

Se advierte en la carrera de Arquitectura  un fuerte sello social, y me llama la atención que muchos egresados se desempeñen en el sector público a diferencia de los titulados en otras universidades. ¿A qué lo atribuye?

-Yo conozco y he trabajado con distintos excompañeros de carrera que están en cargos estatales y municipales. Efectivamente, he notado que hay una cantidad importante de egresados de la Usach que entran al mundo público. Me imagino que tiene que ver con la lógica más social de la Universidad. Esto se ve reflejado también en la etapa laboral de sus alumnos, pero pienso que tanto en el mundo público como privado se requieren las mismas competencias. Es más, quizás en el Estado se necesitan aún más y yo creo que las herramientas que te entrega la Universidad son lo suficientemente contundentes para que cualquier egresado se pueda desenvolver en la vida laboral donde le toque estar. Eso a mí me enorgullece de mi carrera porque he visto que eso no pasa con todas las Universidades.

Palacios recuerda que cuando ingresó a la Universidad de Santiago,  los profesores le decían que si quería hacerse rico con alguna profesión  la Arquitectura no era el camino,  por lo difícil  que es su campo laboral. “Me di cuenta que la vuelta iba a ser larga para lograr el objetivo que me había propuesto que era el desarrollo de proyectos  de impacto. Trabajé en el ámbito del diseño vinculado al mundo inmobiliario y a la tecnología. De rebote llegué a lo político. Ahí fui moldeando la veta para conseguir mi objetivo que era el desarrollo de proyectos,urbanismo y qué mejor que estar a cargo de una comuna para ejecutarlos y que son los que impactan en  el día a día de las personas. Fue una suerte llegar a ser alcalde, pero también de mucho esfuerzo, con algunos costos, pero valió la pena”, enfatiza.

Alcalde, usted se considera un usachino de corazón, ¿qué opinión le merece el trabajo que nuestra Universidad realiza en el campo de la salud por el COVID-19 y el fin de la externalización que promueven nuestras autoridades?

- Es súper importante darle dignidad a cada uno de los integrantes de esta familia de la U. de Santiago. Apoyar a los menos acomodados dentro de la cultura de la Universidad siempre va a ser elogiable y destacable.  Hay distintos mecanismos y fórmulas, pero lo más importante es  que eso tenga una llegada real y eficiente con los trabajadores que necesitan sobre todo en este tiempo de un apoyo mayor de sus empleadores.Respecto al rol de la Universidad  en pandemia lo considero muy positivo. Te cuento que en la municipalidad tenemos un convenio de colaboración con la Usach. He estado trabajando con Rodrigo Martin respecto a temáticas viales, como Américo Vespucio 2; el Parque Mahuida que estamos postulándolo a ampliarlo al doble.  Yo noto en el fondo que más que un compromiso, hay una vocación y una ansiedad por satisfacer esas temáticas dentro de la estructura docente de la Usach. Eso siempre se agradece porque si está esa inquietud, ese trabajo se hace con los mismos alumnos, desde los que están partiendo hasta los egresados y empiezan a conformar equipos con los profesores seniors. Estamos trabajando con varias Universidades, pero siempre la Usach ha destacado desde sus investigaciones y por sus plazos. Me llena de orgullo y satisfacción que con el tiempo la Universidad de Santiago se siga prestigiando y eso no pasa con todas las Instituciones; está peleando la punta y no se queda en una zona de confort, donde se encuentran la mayoría.

¿Qué es para usted la Universidad de Santiago?

- El paso por la Usach me cambió la vida. Entré siendo una persona y salí otra. No tengo más que agradecimientos a la Usach. Fue una etapa de mucha alegría, de muchos sueños, sacrificio y esfuerzo, pero esas son parte de las herramientas que te deja este proceso educativo.  Esos trasnoches y meses continuos de trabajo con poco tiempo para sociabilizar con los amigos, se tradujeron en una valoración mucho mayor y resultados concretos. Producto de ello hoy puedo estar en un cargo que me llena de orgullo, porque fue parte de un trabajo de 15 años de forma continua de mucho sacrificio. La enseñanza que recibí en la Usach, más allá de lo técnico, fue fundamental para que mi labor de alcalde sea bien valorada por los vecinos en las próximas elecciones. La Usach es mi alma mater, marcó y definió mi camino profesional. Me siento usachino y profundamente orgulloso de haber tenido las condiciones para desarrollar proyectos y lograr mi realización personal, con variables como el trabajo de equipo y el apoyo familiar.